Castellana 21 Chema Purón "Castellana 21", fin de semana. Dos de la madrugada, ahí estoy yo. Casi treinta y seis grados son siempre un freno para darse de lleno a cualquier tentación. Mas, de pronto, la veo de mesa en mesa, cómo lo hace la abeja, de flor en flor, repartiendonos copas, sin que en su boca falte nunca la risa, ni una frase de amor... Y quien le cierra la puerta a esa aventura, ella ventitrés años, yo solo allí. Rotos ya los esquemas de la cordura, más veloz que lo cuento, ya estaba ahí. Enredado en un sueño, en lo más alto... sin saber cómo y cuando iba a salir, y es así que llegamos al desayuno... "Castellana 21", allá en Madrid. Diecisiete de Agosto, y entre su ropa, el calor deja poco que adivinar, y, aunque uno no quiera, se van los ojos, sin que a ella tampoco le parezca importar... Y quien le cierra la puerta a esa aventura, ella ventitrés años, yo solo allí. Rotos ya los esquemas de la cordura, más veloz que lo cuento, ya estaba ahí. Enredado en un sueño, en lo más alto... sin saber cómo y cuando iba a salir, y es así que llegamos al desayuno... "Castellana 21", allá en Madrid.